Pedro Cotilla, vocal de la Asociación Extremeña de Enólogos, considera que algunos vinos de La Vera son realmente extraordinarios, y anima a los bodegueros a dar el salto hacia la comercialización. En esta larga, pero interesante entrevista, también hablamos de la DO Ribera del Guadiana y de Tierra de Vinos.
Durante el Concurso de Vino de Pitarra “Feliciano Morcuende” que tuvo lugar el pasado 28 de diciembre, en Talaveruela, tuvimos la oportunidad de charlar con un gran conocedor del sector vitivinícola extremeño, Pedro Cotilla, vocal de la Asociación Extremeña de Enólogos, y experto de la Estación Enológica.
“La característica del vino de pitarra es que se elabora y se consume en el año. Eso es lo que se suele hacer, ya que la vida óptima de estos vinos, al no tener conservantes, es la de un período corto. Por otra parte, hay una componente cultural, la de compartir el vino con tus allegados. No hay una pretension comercial, pero podría haberla”.
“Sí, se puede hacer perfectamente un vino embotellado en La Vera. Yo estuve de jurado, hace unas semanas, en el concurso de pitarra de Jarandilla, y probé vinos que perfectamente podrían ser comerciales, de lo buenos que estaban”.
“Sí, sin duda. Animo a los bodegueros a la comercialización porque he probado algunas pitarras de La Vera que son realmente excepcionales, y tendrían un desarrollo comercial sin ningún problema. Pero, hablamos de un porcentaje pequeño. En cuanto los pitarreros se esmeren en la limpieza, los recipientes, y una conservación adecuada, podrán crear un buen vino comercial. Las variedades de uva son las mismas que se utilizan en el sector, lo único que hay que cambiar es la elaboración, que no es la misma en algunos aspectos, aunque el eje principal sí lo es”.
“La Vera, al tener una mayor altitud, estamos entre los 500 y los 800 metros, puede adaptar algunas variedades de uva que en otras zonas de Extremadura no se ha adaptado bien, y es el caso de esta uva Syrah, que es de origen francés, de climas más fríos. Aquí, en La Vera, en efecto, se está adaptando bien. Pero también otras variedades”.
“No, no hay una uva autóctona. Quizás la uva blanca Palomino sea la más antigua, por ser la más difundida en la península. Pero no podemos hablar de uva autóctona porque no es una zona de tradición vitivinícola”.
En el Concurso de Talaveruela, Pedro impartió una conferencia sobre almacenamiento y accesorios para el vino, así como una introducción a la cata de vinos.
“Es un laboratorio de la Junta de Extremadura donde se realizan los análisis que necesitan los vinos, bien para su comercialización, o bien para información de la bodega, para algún proceso de la elaboración. No es obligatorio. La Estación emite una acreditación (un certificado de los análisis realizados) que tiene valor a nivel mundial”.
“Cuando comenzó a gestarse la denominación de origen para el vino, este tema generó controversia. No estaba claro si hacer varias denominaciones de origen, por territorios, o hacer una sola. Al final se optó por una sola denominación para que el sector tuviera más peso.
Entonces se pensó que el eje que unía las diferentes zonas vitivinícolas, que tenemos en Extremadura, era el Guadiana. Aunque, evidentemente, unas estén más alejadas que otras. Pero, en efecto, las zonas son muy diferentes. La Ribera del Guadiana la componen seis subzonas, cuatro en Badajoz que son Ribera Alta del Guadiana, Ribera Baja, Tierra de Barros y Matanegra. En Cáceres tenemos Cañameros y Montánchez. Son vinos muy diferentes”.
“Los vinos que se están haciendo tienen una relación calidad precio muy buena. Les falta comercialización. Tenemos calidad, y tenemos buenos precios, pero nos falta marketing. Se tendría que invertir más en comercialización. En España la tendencia es a pedir un Rueda, un Rioja o un Ribera sin preguntar por una marca. Sin embargo no se pide un Ribera del Guadiana. Lo que necesitamos es saber cómo vender mejor”.
“El Habla ha sido un gran éxito, pero no pertenece a la denominación de origen Ribera del Guadiana. Pertenece a Vinos de la Tierra que es una categoría inferior porque tiene menos controles. El marketing, y la comercialización, han sido los factores determinantes para que Habla despegue.
La inversión inicial en marketing, de esa bodega, fue brutal. Otras de las bodegas de gran valor es Carabal, en Alía, cerca de Guadalupe, su propietario no es extremeño, es un empresario madrileño. Son bodegas que venden la marca, no el territorio. Si tú preguntas a un comprador de Habla, lo más probable es que no sepa que es un vino extremeño”.
Pedro Cotilla es un asiduo a los concursos de pitarra de La Vera. De hecho, conoció personalmente a Feliciano Morcuende, el reconocido político, nacido en Talaveruela, que puso en marcha estas competiciones. Morcuende falleció en febrero de 2009 siendo Secretario de Organización de IU.
En esta XXIV edición, del Concurso de Vino de Pitarra Feliciano Morcuende, se han presentado 42 vinos tintos y 18 blancos. Los ganadores han sido:
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La Vera tiene una variedad de uva singular, no conocida en el resto de España denominada "TORTOJONA". Está siendo estudiada en la Comunidad Madrid.
Cuando se llevaron muestras de la Vera (hace cuatro o cinco años), era totalmente desconocida y su ADN no se correspondía con ninguna de las catalogadas por ellos hasta ese momento.
No hemos tenido más información. Sería interesante conocer los resultados