El 10 de diciembre de 2019 se presentó Cáceres Viva, el primer proyecto de partido político provincial de Extremadura. El empresario Francisco Alcántara es el líder de esta nueva e ilusionante aventura política que deja la ideología en segundo plano para reivindicar, de forma absoluta, el progreso y el bienestar de los cacereños.
Francisco Alcántara es un empresario de éxito, no en vano su correduría de seguros es una de las más importantes de España. Doctorado en Economía Financiera es, además, un destacado y reconocido profesor universitario. Ahora, a sus 52 años, retoma un antiguo y ambicioso reto: hacer política con verdadera vocación de servicio público, y conseguir que el cuarto diputado por Cáceres sea provincialista.
El pasado 23 de enero Francisco Alcántara estuvo en Losar de La Vera. Vino a conocernos y pudimos mantener una larga e interesante conversación sobre Cáceres Viva, una formación donde la ideología pasa a segundo plano.
“Lo importante es hacer reivindicaciones que nos ayuden a prosperar como provincia. Nuestra principales reivindicaciones son la mejora de la calidad de vida, el aumento del progreso y el bienestar de los cacereños. También queremos combatir los grandes desequilibrios socioeconómicos entre territorios. Aunque la ideología pasa a un segundo plano, Cáceres Viva se define como un partido reformista de centro, liberal e inspirado por valores humanistas. Queremos estar en todas las instituciones donde se pueda influir para que a Cáceres le vaya mejor: Congreso de los Diputados, Asamblea de Extremadura, Diputación y en el mayor número posible de ayuntamientos. Los concejales son los más importantes”.
¿Teruel Existe es el espejo de Cáceres Viva?
“Sí. Es un espejo para nosotros y para toda esa España con problemas de despoblación, de paro, de retención de talento y, en definitiva, con todos los problemas de la España vacía. Es muy bueno que surjan otras iniciativas que intenten conseguir lo que no han conseguido los partidos tradicionales. Partidos nacionales que no defienden a las circunscripciones, ya que los diputados territoriales se tienen que someter a la disciplina interna. Sin embargo, un solo diputado de Teruel Existe en el Congreso ha conseguido 30 millones de inversiones para su provincia”.
¿Cáceres necesita un discurso reivindicativo frente a Badajoz?
“Sin duda. El desarrollo de las dos provincias extremeñas no está siendo equiparable. Badajoz crece en población y en PIB, mientras Cáceres pierde cada vez más habitantes y peso económico. Por tanto hay algo que no se está haciendo igual en ambos territorios. Este es un punto fundamental de nuestro discurso. Nuestro ámbito de actuación es provincial y eso nos diferencia de los partidos regionalistas”.
El fracaso del regionalismo
Hablando de regionalismo ¿Por qué fracasan los partidos regionalistas en Extremadura?
“En Extremadura el regionalismo ha estado muy diluido por el PSOE. Los dos partidos regionalistas que hay actualmente, Extremeños y Extremadura Unida, coinciden en ese argumento. Es el propio PSOE el que ha asumido ese rol regionalista a nivel de discurso, sobre todo en la época de Rodríguez Ibarra, pero luego ha sido incapaz de hacerlo efectivo en las instituciones, en el Congreso de los Diputados por ejemplo. También han influido negativamente las alianzas con las formaciones tradicionales. 40 años de regionalismo extremeño para nada. Para no tener representación real en las instituciones, para no poder influir realmente en benéfico de nuestra tierra”.
¿Cómo ha sido la acogida de Cáceres Viva por parte de los ciudadanos?
“Increíble. Nos ha sorprendido la gran acogida, sobre todo en la ciudad de Cáceres que es donde hemos presentado el proyecto político. Hay una demanda creciente, y una gran receptividad. Nosotros queremos ser un reflejo de la sociedad. El nuestro es un partido donde hay parados, profesionales, asalariados, empresarios, funcionarios… Nuestra agenda para las próximas semanas es visitar una treintena de localidades porque de manera espontánea han surgido personas que se han interesado y vamos a ir a visitarlas. Eso evidencia que hay un interés real. Por otra parte, hemos comenzamos a ser molestos para los grandes partidos. Hay cierta inquietud porque saben que llenamos un hueco”.
Estáis en la fase de construcción de la organización territorial del partido ¿cómo queréis que sea esa estructura?
“La idea es montar una estructura comarcal para conocer verdaderamente los problemas que afectan a los ciudadanos de cada zona. A nivel provincial hemos creado una plataforma constituyente formada por veinte personas que son los que han puesto en marcha el partido. Eso mismo es lo que queremos que se replique a nivel comarcal mediante comités. No pensamos que tenga que haber un líder. Queremos que sea un proyecto participativo. Nuestra idea es presentar el Partido en cada comarca”.
Qué llamamiento harías a los ciudadanos que quieran formar parte de Cáceres Viva
“Necesitamos personas que se identifique con nuestro proyecto, que es el desarrollo de Cáceres, y que nos ayuden. Personas comprometidas y que puedan aportar. Queremos un partido en el que entre mucha gente de la sociedad civil. Queremos construir un partido de abajo arriba. Para nosotros es vital tener personas que comiencen a postularse, en eso estamos ahora”.
Empresario y doctor en Economía Financiera
Francisco Alcántara tiene 52 año, es doctor en Economía Financiera y propietario de cuatro empresas, una de ellas, Albrok Mediación, se cuenta entre las principales corredurías de seguros de España con 83 delegaciones y 60.000 clientes. Cuando le preguntamos por sus orígenes, se autodefine como un chaval de barrio humilde.
“Mi padre era panadero y mi madre ama de casa. Mis padres nunca se fueron de vacaciones, ni descansaron los domingos. Desde pequeñito tuve claro lo que era el esfuerzo. Estudié y acabé siendo doctor en Economía Financiera por la Universidad Complutense. Me contrató una empresa multinacional francesa, y siendo muy joven ya tenía un puesto ejecutivo importante. Pero siempre quise volver a la tierra, quería volver a Cáceres para emprender mis propios proyectos. Y eso es lo que hice en 2001. Abandoné una vida de profesional acomodada por dar rienda suelta a mis propias iniciativas. En ese tiempo yo tenía tres retos: trabajar en la universidad, vincularme a una entidad financiera y entrar en política. Conseguí ser profesor, actualmente de Dirección Estratégica y Dirección de Operaciones en la Universidad de Extremadura. También entré en la Caja de Extremadura, y desarrollé la parte de banca seguros durante cinco años. El reto que tenía pendiente era la política y en eso estoy”.
¿Cuándo fundas tu primera empresa?
“Salí de la Caja Extremadura y me hice empresario. Decidí emprender en el peor año posible, en 2008, en el año de la crisis. Entre 2007 y 2008 monté tres empresas. Ahora soy un empresario que tiene cuatro empresas consolidadas. También dispongo de unos recursos humanos, y unos procesos, que me permiten delegar y dedicarme a mi vocación política, que era mi asignatura pendiente”.
Además de los seguros, en qué otras áreas de actividad se enmarcan tus empresas
“Tengo una tienda de ropa en Cáceres, se llama Cynara y aguantó la crisis. Con la familia de mi mujer, tenemos una explotación ganadera en el término municipal de Casar de Cáceres. Son vacas de carne. Y por último tenemos una empresa de carácter tecnológico. Es un tema de innovación tecnológica en el mundo del seguro. Estamos generando una aplicación que se llama Foto Seguro. Coges una póliza de seguro, haces una foto y a partir de ahí la propia aplicación te compara precios y empresas. Se trata de un comparador por reconocimiento óptico de caracteres”.
¿Cuándo entras en política?
“Hace un año. Me propusieron que fuera el candidato a la alcaldía de Cáceres por Ciudadanos. Era un partido ilusionante, que abanderaba la regeneración política. El problema es que en Ciudadanos entró mucha gente no por vocación política, sino como inserción profesional”.
Poco después de ser elegido concejal, abandonas Ciudadanos en compañía de otra concejala, María Del Mar Díaz, ideóloga también de Cáceres Viva ¿Por qué lo hacéis?
“Abandonamos el partido porque al final Ciudadanos no era el sitio para los que tenemos una verdadera vocación de servicio público, para los que estamos en política no para vivir de ello. Ciudadanos se ha convertido en una pandilla de amigos que han conseguido lo que querían, ocupar cargos y estar viviendo de la política. En eso chocamos mucho los que tenemos independencia económica y queremos tener independencia de criterio y opinión. Allí prevalecen personas dóciles, personas que adulan al líder. Nosotros no encajábamos”.
Modelo económico colonial
¿Cuáles son los principales problemas de Cáceres y qué propones para abordarlos?
“Sin duda la falta de población y la tendencia creciente a perder población. También la retención del talento. Muchas personas con gran talento, y con ganas de emprender, al final terminan empleadas fuera de la provincia. El desempleo. La tasa de desempleo está en torno al 20% y se agudiza entre la población juvenil, casi el 50%. Otro gran problema es que tenemos a una buena parte de la población subsidiada. Se ha creado una cultura en contra del esfuerzo y el emprendimiento. Tenemos una presencia masiva del Estado en todos los ámbitos, tanto sociales como económicos, así como una fuerte estructura funcionarial. A pesar de que cada vez somos menos lo que cotizamos. Nos faltan infraestructuras. La llegada de la fibra, o el 5G, sería más interesante para la provincia de Cáceres, y su desarrollo, que el propio AVE. Y sería menos costoso.
Necesitamos que la provincia se muestre competitiva para recepcionar otra de las cosas que no tiene, inversiones privadas importantes. Necesitamos crear más empleo de calidad. Uno de nuestros objetivos es hacer de la provincia un sitio competitivo para la llegada de empresas grandes, y eso no se improvisa. Se trata de tener comunicaciones adecuadas, mano de obra cualificada, ofrecer incentivos fiscales o suelo. Ahí las AA.PP pueden hacer mucho. También hay que salir, de forma proactiva, a buscar a los empresarios”.
¿Cómo valoras los gobiernos de Extremadura?
“Los valoro como años perdidos. Me entristece mucho que con la cantidad ingente de fondos estructurales que han llegado de la Unión Europea, para que esta región convergiera en términos de renta y bienestar, los políticos no han sido capaces de conseguirlo. A pesar de los más de los 22.000 millones de euros que han llegado a Extremadura en los últimos 22 años, que es casi un rescate bancario, seguimos estando a la cola de las estadísticas de prosperidad, bienestar o empleo. Y ¿quién ha estado al frente de Extremadura? Pues salvo cuatro años de Monago, los socialistas. Por tanto una decepción absoluta. Hemos tenido unos políticos muy incompetentes”.
Por último, ¿cómo es, desde tu punto de vista, el momento económico de Cáceres?
“Aunque suene radical, el actual modelo económico en Extremadura, y en Cáceres en particular, es un modelo colonial. Extremadura es una fuente de recursos naturales que se exportan para el desarrollo de otra regiones. El valor añadido se queda fuera porque las empresas tributan fuera. Es vergonzoso que no nos beneficiemos de nuestro potencial energético. A los extremeños no les cuesta más barata la energía a pesar de ser grandes productores. Pero falta gente que lo diga en voz alta y que sea capaz de intervenir las tarifas. Incluso hay pantanos en la Cuenca del Tajo que impiden zonas de regadío porque ese agua va a la producción eléctrica. ¡Qué mínimo que una reducción de tarifas! Además, eso nos haría más competitivos para atraer inversiones e industria”.
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